Otra pérdida

El pasado lunes se hacía público el cierre de las instalaciones que la Fundación Germán Sánchez Ruipérez mantiene en la Calle Peña Primera de Salamanca. Sin duda una noticia tan negativa como inesperada y que coincide en el tiempo con la celebración del 15º aniversario de la designación de Salamanca como "ciudad europea de la cultura" (miramos al pasado para no afrontar el futuro).

El cierre de esta biblioteca, denominada "Centro Internacional del Libro Infantil y Juvenil", supone un nuevo mazazo al calificativo "cultural" que acompaña al nombre de nuestra ciudad. Sin salirnos del ámbito de las bibliotecas hace un año que cerraban sus puertas las que la Obra Social de Caja Duero mantenía en algunos barrios de nuestra ciudad.

Uno de los aspectos que más duele a los salmantinos es la falta de explicaciones y, aunque se respeta la gestión de una fundación privada, se pide más interés a las Administraciones Públicas para evitar que ocurra lo peor.

No parece, visto el traslado de trabajadores, la promesa de reforma del edificio y las ayudas institucionales, que las cuestiones económicas hayan pesado mucho en la decisión. A diferencia de otros casos en los que esa razón, junto con la libertad que esta sociedad otorga al propietario para hacer lo que le plazca, justificaba la decisión tomada.

"Nuestra Fundación está comprometida con un ambicioso proyecto cultural y educativo en una sociedad democrática. Estimular las formas más variadas de creación cultural, contribuir al fomento de la lectura, a la innovación educativa y al desarrollo de los estudios universitarios, son objetivos que orientan nuestras acciones". Germán Sánchez Ruipérez.

Por lo pronto, ya hay una recogida de firmas on-line y se esperan nuevas acciones por parte de los usuarios y trabajadores con el fin de evitar el cierre.